El 3 de noviembre de 1955, los hermanos Dante, Guido y Dino Arrigoni fundaron la sociedad comercial colectiva “Arrigoni Hermanos”, empresa dedicada al rubro metalmecánico que empleaba tecnologías de vanguardia traídas desde Italia. A los pocos años, la empresa se destacó por su innovación en la producción de matrices para la industria manufacturera, para luego incursionar en el rubro metalúrgico al incorporar productos de carpintería metálica.

En 1958 se construyó la primera planta de producción en la comuna de Macul en la ciudad de Santiago, con tecnología y mano de obra calificada. Gracias a estos adelantos y a la obtención de su primera licitación pública, Arrigoni Hmnos. se convirtió en contratista estable del Ministerio de Obras Públicas. Atentos a las oportunidades y necesidades de infraestructura relacionadas, los hermanos trajeron a Chile las primeras ventanas de aluminio, tecnología importada de Italia y estrenada en el edificio Montecarlo de Viña del Mar.

En 1965 se construyó la segunda planta productiva. Una de sus obras más emblemáticas fue la fabricación y el montaje de las estructuras de acero del velódromo del Estadio Nacional. Este mismo año la empresa se transformó en “Sociedad Metalúrgica Arrigoni Hnos.”. La empresa sigue con su dinámica de crecimiento, implementando mejoras, aumentando su capacidad y afiatando sus estándares de calidad gracias a programas de capacitación propios para sus trabajadores. A fines de la década de los 60, comenzó a trabajar para proyectos mineros, con el suministro y montaje de estructuras metálicas misceláneas para Sewell de El Teniente, Los Bronces de Disputada de Las Condes y Calama de Codelco Norte.

En esta década se incorporó nueva tecnología traída de Italia y se instaló la primera línea de perfiles soldados, hito que dio inicio a la participación en proyectos de gran envergadura. En este período es la construcción del edificio para la Unctad III, actualmente Diego Portales, la fabricación y montaje del edificio de la Cooperativa del MOP, uno de los primeros edificios de acero, la fabricación de las primeras vigas de acero para puentes y el suministro de estructuras para la ampliación de la fundición de Caletones de El Teniente.

Con la ampliación de la Fundición Caletones, Arrigoni incorpora el servicio de fabricación y montaje de estructuras pesadas para la minería. En 1987, la gestión de la empresa se transfiere definitivamente a la segunda generación Arrigoni, lo que promueve el cambio desde una sociedad colectiva comercial a una sociedad anónima cerrada con el nombre de "Sociedad Metalúrgica Arrigoni Hermanos S.A.”.

En 1988, se construyó una nueva planta en la comuna de Quilicura, que permitió dar un salto importante en capacidad y productividad. Se incorporó el concepto de fabricación lineal y se innovó en el mercado al introducir la gestión computacional de los procesos productivos. En esta década los proyectos de inversión minera se transformaron en el principal mercado de la empresa, participando en proyectos de Minera Disputada, Escondida, del Pacífico y Codelco Chuquicamata, entre otras. Con la instalación de la planta de Quilicura, la incorporación de tecnologías vanguardistas e innovadores procesos de producción, la empresa va sumando a sus servicios toda una cadena de valor agregado, lo que la impulsa rápidamente al liderazgo en el rubro.

Esta década estuvo marcada por la incorporación de tecnologías de vanguardia y el comienzo del clúster minero; la empresa innovó en la incorporación de maquinarias bajo control numérico CNC y servicios de ingeniería de detalle 3D, lo que dio paso a la creación de la empresa de ingeniería Quindata (1992), actualmente Arrigoni Ingeniería.

En el año 1991, se instaló la primera línea en el país para la fabricación automática de pisos de acero, lo que permitió mejorar la calidad del producto nacional, ofrecer una solución más competitiva y oportuna, pasando a ser los líderes indiscutidos del mercado. Este emprendimiento fue el que posteriormente daría origen a la actual empresa Proindar del Grupo.

El año 1992 se incursionó en el primer emprendimiento fuera del área méramente metalúrgica, por medio de la construcción de condominios y edificios habitacionales.

En el área industrial, los 90 se ven marcados por la presencia de la empresa en grandes proyectos de importancia nacional. En minería participó en los principales proyectos del sector: Candelaria, Escondida, Codelco en todas sus divisiones, Collahuasi, Minera Cerro Colorado, Minera El Indio, Minera La Coipa entre otras. En obras públicas en el año 1994 se inició la fabricación y el montaje de las estructuras del aeropuerto de Santiago, Arturo Merino Benítez, para luego seguir colaborando en sus posteriores etapas de ampliación.

A principios de esta década, se lidera en la industria del acero estructural en aseguramiento de la calidad, Arrigoni Metalúrgica obtiene la certificación internacional American Institute Of Steel Construction (AISC). En 2001, Arrigoni Ingeniería inició la exportación de ingeniería de detalle a países como USA, Panamá, Canadá, República Dominicana, Venezuela, Colombia, Brasil y Bolivia. En esta década en obras públicas se destaca la participación en el suministro de las estructuras del aeropuerto Carriel Sur; en obras portuarias el muelle de Ventanas, muelle Caldera, Puchoco y el puerto de Liquen, entre otros. Además de lo anterior, se da inicio a la internacionalización de la metalúrgica, al participar en los proyectos de Cerro Matoso en Colombia, Due Run en Perú y otros en Argentina y Bolivia. Proindar, Proveedora Industrial Arrigoni, nace en el año 2007 con el objetivo de impulsar el crecimiento del Grupo en el mercado de pisos industriales mediante la oferta de servicios complementarios. En el área construcción, en el año 2003, Arrigoni Inmobiliaria ingresó al mercado de la venta y arriendo de proyectos industriales y comerciales llave en mano.

En el área construcción, se creó Arrigoni Montajes en 2010, aprovechando la experiencia empresarial del Grupo, la de su organización y un gran capital de conocimientos técnicos. Estos factores le han permitido emprender desafiantes proyectos de construcción, con una alta capacidad de gestión, ingeniería y profesionalismo. Arrigoni Servitrans S.A. nace el año 2010, producto de la asociación de Arrigoni S.A. y Servitrans S.A., empresa fundada en el año 1994, con una larga experiencia en el mercado de soluciones modulares. En el área concesiones, nace también Vielsa, concesionaria del barrio industrial Ujina de la Compañía Minera doña Inés de Collahuasi, con el objetivo de diseñar, construir, operar y transferir las instalaciones. En el área minería, en 20l0 el Grupo ingresa al negocio de la explotación minera, así nace Arrigoni Minería, que adquiere una participación del proyecto Pampa Camarones, con el objetivo de dedicarse a la gestión y operación de proyectos mineros, buscando una producción competitiva y comercialización diversificada. En el área industrial, en 2011 se terminó la construcción de la nueva planta de la Metalúrgica, con una inversión de US$ 50 millones, en la cual se incorporaron las mejores prácticas de la industria a fin de liderar y abastecer el mercado Latinoamericano.

El Grupo ha desarrollado una extensa red de inversión y gestión en empresas en completa sinergia, para entregar soluciones integrales de infraestructura y servicios. Con este objetivo y considerando las necesidades integrales de los clientes, las proyecciones de inversión, el rol activo en el progreso regional y la apertura a los mercados internacionales, la compañía se reorganiza y consolida una nueva identidad: un holding de empresas con un eficiente gobierno corporativo: Arrigoni S.A.

A mediados de la década del 2010, la situación socioeconómica mundial se enmarca en un contexto de rápidos contrastes y la expansión de la internet se proyecta rápidamente a todas las cosas. La competitividad en los mercados se vuelve intensa, descarta viejos paradigmas del desarrollo económico y la productividad tropieza con los alcances del cambio climático. En este contexto, Arrigoni Metalúrgica ha elegido seguir progresando sobre la base de la innovación, tecnologización y protección ambiental, de manera de sostener su avance competitivo constante en el mercado nacional y regional; aspecto clave fue el promover con más fuerza su experiencia en el montaje y construcción en acero estructural. La implementación de estas políticas empresariales le permitió licitar con seguridad, y ganar entre 64 oferentes nacionales e internacionales, la fabricación y montaje del proyecto de ampliación del Aeropuerto de Santiago (AMB), el primer y más complejo proyecto en Chile desarrollado íntegramente bajo el sistema “Building Information Modeling (BIM)”.

La evolución acelerada del acero estructural a nivel mundial ha impuesto en la compañía la necesidad de proyectarse hacia la industria 4.0, con el consecuente desafío de evolucionar en forma equilibrada con nuestra sociedad, por medio de una responsabilidad y rol empresarial compatibles con los cambios contingentes que vive nuestro país y el mundo.

Durante el 2018 el Grupo Arrigoni culmina la creación de su emblemática Área Ambiental, cuyo norte es compatibilizar los principios socioeconómicos de la empresa privada con el cuidado ambiental. Inicialmente, y gracias a la sinergia del conglomerado, se desarrolla una solución avanzada en bodegas modulares de almacenamiento para residuos y sustancias peligrosas (respel/suspel), y con ello, un nuevo producto Arrigoni denominado: M-aga®. Estas bodegas cuentan con toda la experiencia del conglomerado en materia fabril (Arrigoni Metalúrgica S.A. y Proindar SpA.), con lo cual se logra una solución avanzada y de alta calidad frente a las necesidades particulares del mercado y las leyes vigentes. A principios del 2019 y complementando la oferta de Arrigoni Ambiental, se integran todos los servicios ambientales necesarios para que los clientes cumplan íntegramente con la ley respecto de la gestión responsable de respel/suspel. La orientación de Arrigoni Ambiental es la Economía Circular y conforme a esta visión es que a finales del 2019 se crea Arrigoni Ambiental NFU, destinada al reciclaje de neumáticos fuera de uso (NFU) y gracias a la asociación estratégica con un grupo de gestores con una importante experiencia en el proceso de Pirólisis, cuyo sistema produce, al menos, 3 subproductos reutilizables. Inicialmente, el emprendimiento proyecta un aporte de un 7% del reciclaje del total de NFU generado en el país, del cual sólo el 13% es actualmente reciclado y, con la implementación de la ley REP, para el 2028 el reciclaje y revalorización de NFU deberá llegar al 90%.

En nuestro conglomerado de empresas estamos constantemente considerando nuevas oportunidades que nos permitan generar empleo y crecimiento para el país, siempre de manera sustentable; es decir, enfocados en 3 pilares fundamentales: Ambiental, Social y Económico.

Buscamos crecer en investigación y desarrollo, porque estamos convencidos de que tenemos un deber como país y nuestro conglomerado con éste; en consecuencia, la diversificación es nuestro horizonte.